Es
esta ocasión mi paso por la Escuela Julián Besteiro ha estado marcada por la
noticia del fallecimiento de Gabi (José Gabriel Gonzáles González), de la que
nos informo Luciano el primer día, ya que, algunos de los presentes le conocíamos
de anteriores estancias en la escuela.
He
pensado, que puedo hacer a demás de poner la imagen de su libro, como mi
modesto homenaje a este gran educador y he recordado una letras que escribí, en
el año 2006 y que no llegue difundir, sobre mi aprendizaje en esta magnifica
escuela, que aquí plasmo.
Con motivo del curso
“conocer el sindicato” ha tenido lugar un encuentro en la Escuela Julián
Besteiro que nuestro sindicato U.G.T. tiene en Madrid.
Este curso ha servido
para poner en contacto unos compañeros con otros, intercambiando experiencias e
información, denotándose que todavía existe desconfianza, recelos e inseguridad
entre todos, cuando realmente lo que tiene que haber es sinceridad y valentía
sin tener que sentirse por ello nadie ofendido, precisamente estas reuniones
tienen que servir para mejorar y unificar criterios.
El
primer día Gabriel como docente, me trajo a la mente mi paso por C.O.U. y la
Historia Contemporánea para mí apasionante, está asignatura marco todo mi ideal
hasta hoy en día, descubrí las luchas obreras, la revolución industrial, me
vinieron nombres a la mente, Bakunin, A.I.T., Marx, la primera internacional,
la segunda internacional, la crisis del 29, etc.
Mi padre al igual que
el padre de Gabriel, también estuvo en el frente (Guerra Civil Española) con
la quinta que llamaron del biberón en el
último año de la contienda, pero en el lado contrario, donde le llevaron. Miro
a mi hijo que tiene la misma edad que mi padre, cuando se lo llevaron a la guerra y veo muchas vidas destrozadas, por la
sinrazón y la locura.
Con
Luciano profundizamos más, anarquía, socialismo, tanto es así, que surgió un
debate, en el cual nos enfrascamos, Luciano muy generoso nos dejo debatir.
El
último día cuando Miguel Ángel nos enseñaba las fuentes del derecho laboral,
recordé una anécdota que tengo de un profesor, que por casualidad lo tuve en
tres etapas de mi vida, que curiosamente coinciden con tres etapas de la
llamada transición de la dictadura a la democracia.
En primer lugar me dio clases en un colegio
de los que hoy se llaman concertados, de una asignatura que a algunos os sonara
un poco raro Formación del Espíritu Nacional, en un curso del Bachillerato
Elemental, mas tarde me lo volví a tropezar en sexto de Bachiller con la misma
asignatura F.E.N. ó Política como también se le llamaba, pero esta vez en el
instituto en el curso 75-76. Lloró en clase cuando murió Franco, dándonos la
noticia. Tras mi paso por C.O.U. y por el servicio militar, que tuve que hacer
por cojones, sigo siendo antimilitarista, me tropiezo a este educador en el
Escuela Universitaria de Ciencias Empresariales de Murcia, impartiendo
Introducción al Derecho Civil y Patrimonial en el curso 80-81, (intento golpe
de estado 23 F), para estas fechas es un gran demócrata y defensor de las
libertades, “cosas que tiene la vida”.
Mis pensamientos
vuelven a clase y surge en el debate esta
frase “el derecho a la huelga es un derecho Constitucional”, salta el camarada
Damián y dice:- Nosotros estamos fuera de la Constitución, pues no tenemos
derecho a la huelga. Apostilla el camarada F. Argomaniz:- Si la realizamos las
estructura capitalistas del Estado se desmoronan.
Bueno,
lo que pretendía decir con estas historias es que los tres educadores han sido
formidables.
Nosotros
pensando en el convenio, en como sacarle las pelas a la empresa (ella siempre
piensa lo contrario), pero hay algo mas, mucho mas, el edificio donde esta
enclavada la escuela invita a la reflexión y la cultura, el patio interior es
encantador y mas en esta fechas de primavera, con el chisporroteo continuo de
la fuente donde acuden los gorriones a bañarse, la meditación me retrotrae hasta cien años atrás. Este
edificio fue construido a principios de los años cuarenta y utilizado como
escuela, en la formación de mandos del frente de juventudes, mas tarde fue
utilizado como escuela agraria, cedido por fin a U.G.T. en el año 1.988 en
usufructo para que fuera destinado a la educación.
Mi
paso por la biblioteca fue efímero, pero fructífero casi logre leerme un libro
de psicología de la educación, pues como padre siempre hay cosas que aprender.
Las
fuentes del Derecho.........…
De
nuevo en el día de hoy, y transcurridos unos pocos años desde mi anterior
apunte, doy mi agradecimiento a Luciano por la pasión que pone en enseñarnos, que
sigas siempre así, (en la próxima ocasión prometo intentar no escaquearme),
espero que Elva este totalmente recuperada y para Benjamín, que puedo decir de
Benjamín, son ya algunos años que nos conocemos y que debatimos, le profeso un
gran respeto y admiración.
Para
Carlos el coordinador, muchas gracias por todo, ha sido una estancia muy agradable, saludos.
De
mi estancia en la Escuela siempre he intentado traerme algún tesoro como: el cd
¡Viva la República!, Canciones populares o el Homenaje a
Miguel Hernández,
Centenario 1910 – 2010, del que pude disfrutar, pero, en
esta ocasión tengo el libro póstumo de Gabi, “Coplas ocultas de la República”
un tesoro que ya he empezado leer y que prometo custodiar.



